Este Puente de Mayo la dirección de Xplota (Jesús Iglesias y un servidor) y sus respectivas parejas -como resultado de la II Xuntanza de Amigos do Lérez, a la que cada vez acudimos menos gente, pues está vez fallaron Emiliano, Paula y David-, escogieron como destino la comarca Sierra de Cazorla, alojándose en una casa rural de Hinojares, un pueblecito situado en el Valle del Turrilla -provincia de Jaén- que hace del contraste su seña de identidad, de esos lugares que… o vas a tiro fijo, o difícilmente pasarás por la zona, un rincón de Andalucía poco conocido pero que resultó ser realmente sorprendente -y así espero mostrároslo-. Nos encontrábamos, por lo tanto, en la tierra de los olivos… ¡Cientos de miles de olivos!
Elegimos cuidadosamente un lugar que nos dejase a mano multitud de rutas que no nos podíamos perder (bueno, a mano… lo que se dice a mano… al final resultaron más de 1500 Km.)
Nuestro campamento base era el apartamento Hierbabuena de la Casa del Tío José María, 80 m2 para nosotros solos (4 personas) con todo lo necesario para que la estancia fuese de lo más agradable. La chimenea… ¡esencial para nuestras Xuntanzas! Así como la queimada… ya os contaré ya…
La verdad es que las fotos no le hacen justicia a la casa, pues es mucho más atractiva de lo que muestran las imágenes.
Llegamos a la hora de comer, así que dejamos las maletas y nos fuimos hambrientos -despues de prácticamente 7 horas de viaje por culpa de los interminables atascos en la A4- al restaurante del pueblo, el único que hay acompañando a otros dos bares.
¡Las raciones eran enormes! Buena muestra de ello es la siguiente imagen. ¡Qué barbaridad! Sobró comida porque era imposible terminar todo aquello, pero vamos… casi casi…
Hinojares, iluminado por la noche después de una tarde de cascadas que os contaré en el próximo episodio, pues regresamos con más de 1000 fotos y 3 GB ocupados para la posteridad.
No cabe la duda de que se trata de un ambiente rural y sosegado singular para perderse de vez en cuando por los rincones de la provincia de Jaen.
Esas raciones de queso con tomate y carne adobada me abren el apetito en cantidad 😉